Los tres mosqueteros, superproducción francesa

 

La enésima versión del clásico de Alejandro Dumas ha llegado este año a los cines en forma de superproducción europea. Y tendrá su continuación en 2024. Los tres mosqueteros: D'Artagnan se estrenó en España en mayo y su segunda parte, Los tres mosqueteros: Milady, se ha estrenado este mes de diciembre en Francia y llegará a finales de enero de 2024 a nuestro país.

Esta nueva versión es muy interesante a nivel estético y musical. La partitura corre a cargo de Guillaume Roussel, y tiene cierto estilo cercano al de Han Zimmer. De hecho, en algunas escenas de acción, trae reminiscencias de la saga de El caballero oscuro.

Los tres mosqueteros: D'Artagnan goza de buen ritmo, buenas coreografías y un hábil equilibrio entre modernidad y tradición. Dirige Martin Bourboulon, artífice del biopic Eiffel, y el elenco cuenta con dos rostros muy conocidos internacionalmente: Vincent Cassel, visto en películas como Especiales, Cisne negro o Jason Bourne, y Eva Green, la otrora chica Bond de Casino Royale y conocida también por El reino de los cielos o El hogar de Miss Peregrine para niños especiales.

En 2011 hubo otra adaptación de Los tres mosqueteros con vocación de ser una actualización del clásico para el siglo XXI, pero no lograba ese equilibrio entre conservar la esencia y resultar visualmente moderna, sino que a pesar de ser muy espectacular, la esencia más bien se difuminaba. Ahora, con adaptación en forma de dilogía, mantiene mejor la esencia, y aunque visualmente no sea tan espectacular como la de 2011, sí resulta lo suficientemente actual visualmente para dar continuidad al clásico de Dumas en las pantallas del nuevo milenio. Larga vida a los mosqueteros. Uno para todos y todos para uno.

Fast and furious X, la venganza

 

El director francés Louis Leterrier, responsable de títulos como Transporter, El increíble Hulk, o Ahora me ves,  toma las riendas  de Fast and furious 10, En esta ocasión, la familia y la banda de Dominic Toretto se ven amenazadas por el hijo de Hernán Reyes, el capo de la droga con quien se enfrentaron en la quinta entrega de la saga, que diez años después de aquellos acontecimientos, está sediendo de venganza y armado hasta los dientes. 

En la línea de lo que viene siendo la saga, se trata de una montaña rusa de más de dos horas de metraje a base de explosiones, tiros, peleas y acrobacias automovilísticas imposibles. Un espectáculo audiovisual donde lo de menos es la trama y cuyas bazas más importantes son el ritmo frenético, el carisma de los actores, el sentido de lazo familiar que une a los personajes, la hábil mezcla de acción y humor y el tono distendido de no tomarse en serio a sí mismo. Estos ingredientes bien mezclados dan una chispa que es la seña de identidad de la franquicia, la cual quizá se había apagado un poco en la anterior entrega, y que siendo la novena podía hacer presagiar el final de la saga, pero que en esta nueva película ha revivido y además garantiza la continuidad, ya que deja el final abierto y la próxima entrega se encuentra en preproducción y  con el estreno previsto para 2025.

En Fast and furious 10 repiten en sus papeles Vin Diesel, Michelle Rodríguez, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, Jason Statham, entre otros. Y el nuevo fichaje para encarnar el villano es Jason Momoa, conocido actualmente por Aquaman y que había saltado al estrellato con el remake de Conan, el bárbaro.

Una cosa interesante de la franquicia es que los personajes son muy numerosos y no todos salen en todas las películas, pero cada vez que están, son interpretados por los mismos actores. Ninguno ha tenido dos rostros distintos. Y eso que el inicio de la saga se remonta a 2001. Ya son 10 películas en 22 años. Los motores siguen rugiendo y quemando gasolina con éxito en la que posiblemente ya sea la saga cinematográfica más longeva y prolífica del siglo XXI.

La vida de Brianeitor, superación personal

 

Brianeitor es un joven gamer almeriense que padece atrofia muscular degenerativa y se ha convertido en una estrella de los videojuegos y las redes sociales. Este año ha tenido su debut cinematográfico en la película Campeonex y en este documental sobre sí mismo, La vida de Brianeitor, dirigido por Álvaro Longoria.

A través de testimonios de familiares y amigos, y del propio Brianeitor, descubrimos una impresionante historia de superación personal y toda una lección de vida sobre cómo afrontar la adversidad por muy dura que esta sea. Un ejemplo inspirador para muchas personas.

También la unidad familiar que se forma en torno a él es fundamental para salir adelante. 

El tratamiento cinematográfico del director es el de retratar al protagonista de una forma muy directa, cercana y sencilla, sin grandes artificios. Es un material difícil de manejar sin caer en la sensiblería o el sensacionalismo, pero Longoria lo consigue, dando como resultado un documental equilibrado en forma y fondo. Consigue transmitir la historia y emocionar pero en su justa medida, sin excesos, y con mucho respeto hacia el protagonista y la gente que lo rodea. 

Campeonex, vuelve equipo de Javier Fesser

 

Tras el éxito de Campeones en 2018, vuelve el director Javier Fesser a la carga con la secuela Campeonex, en la que el peculiar equipo de baloncesto de la primera entrega, nos lleva esta vez al mundo del atletismo y los eSports, de la mano de una nueva entrenadora, una joven con fama de gafe que necesita hacer prácticas para completar sus estudios, interpretada por Elisa Hipólito, y con un nuevo fichaje en el equipo, el gamer Brianeitor.

La película tiene ritmo y chispa como su predecesora, si bien a nivel de calado dramático tenía más enjundia el personaje del entrenador de la primera entrega que la estudiante en prácticas de la presente secuela. No obstante, hay que reconocer el espléndido trabajo de la actriz Elisa Hipólito, hija de los actores Carlos Hipólito y Mapi Sagaseta, que aporta el carisma necesario para llevar el peso de la trama. Del mismo modo, también cabe decir que la evolución de todos los personajes que integran el equipo era mayor en la película original.

A pesar de estas diferencias, Campeonex es una digna secuela, con un arranque y un final que desprenden muchísima energía y mantienen al espectador pegado a la pantalla. En general tiene buen ritmo y transmite buenas vibraciones. Muy recomendable.

Feliz Navidad 2023

 

Os deseo a todos que paséis una Feliz Navidad. Aunque durante todo el año debemos llevarnos bien con lo demás, tener ilusión, estar alegres, pasar tiempo con la familia, con los amigos, siempre puede haber cosas del trabajo, de la rutina diaria, de la vida acelerada que llevamos, que nos hacen pasar a un segundo plano estas cosas que realmente son las que importan. Por eso es importante aprovechar estas fechas para ilusionarse, para reconciliarse, para estar más atentos a quienes nos rodean y a nuestros seres queridos, ya que es ahora cuando estos pequeños detalles son la prioridad sobre las otras cosas que nos distraen el resto del año.

Feliz Navidad y que 2024 sea un año de buen cine y de cosas buenas para todos.

Misterio en Venecia, tercera encarnación de Poirot por Kenneth Branagh

 Kenneth Branagh continúa con sus adaptaciones de las novelas de Agatha Christie, y tras Asesinato en el Orient Express y Muerte en el Nilo nos trae este año Misterio en Venecia, una película basada en la novela de Agatha Christie Halloween party. De las tres películas, posiblemente esta sea la más redonda. El estilo de Branagh para estas adaptaciones de la célebre novelista británica, apuestan por un estilo más intenso que el de la investigación serena que suelen tener las películas basadas en las novelas de Agatha Christie, como aquellas protagonizadas en los años 70 por Peter Ustinov o la serie de televisión protagonizada por David Suchet.

La estética elegida por el director tanto para caracterizarse él mismo como el detective Hércules Poirot, así como también la puesta en escena y la estética en general de la película, cuenta con una paleta de colores bastante contrastados con ángulos de cámara muy pronunciados, y quizás esa estética, donde mejor casa con la historia, es precisamente en esta nueva película, Misterio en Venecia.

El famoso detective belga Hércules Poirot se encuentra retirado en Venecia cuando recibe de repente la visita de una antigua amiga, que es una novelista de éxito y cuyas novelas suelen tener de protagonista a un personaje inspirado en el propio Poirot, pero sus tres últimos libros han sido un fracaso y busca una nueva historia que relance su carrera. Esta se encuentra en Venecia para asistir a una sesión de espiritismo con una médium a la que quiere desenmascarar y le pide a su amigo Poirot que la acompaña a la sesión para ayudar a destapar el fraude de la médium,

Así como en las dos anteriores adaptaciones había contado con un elenco lleno de estrellas de la pantalla en este caso ha contado con menos rostros conocidos. Aparte del propio Brannagh, destaca la presencia de Michelle Yeoh, ganadora del Óscar por Todo a la vez en todas partes, que a su vez fue muy conocida a finales de los 90 por ser la chica Bond de El mañana nunca muere y la coprotagonista de la aclamada cinta de Ang Lee, Tigre y dragón. También podemos encontrar a Jamie Dornan, protagonista de 50 sombras de Grey.

Misterio en Venecia es muy entretenida y mezcla elementos tanto del thriller policial como del cine de terror para retratar una Venecia muy sombría que resulta bastante sugerente y desde luego, perfectamente adecuada a la historia que está contando.

Super Mario Bros, en 3D y en pantalla grande

 

Super Mario Bros es una película producida por los estudios Illumination, los mismos de la saga de Gru y los minions, y por la marca de videojuegos Nintendo. La película y es muy entretenida y muy divertida, de ritmo trepidante, pero carece del calado dramático de películas de animación como las de Pixar, lo cual hace que el público objetivo sea más para niños o bien para adultos que sean fans de del videojuego de Super Mario Bros.

Es un poco como ver el videojuego, pero sin interactividad, es decir, como si estás viendo la partida que está haciendo otra persona, ya que los gráficos actuales de los videojuegos y los de la película son muy, muy similares. La aparición de Donkey Kong es muy divertida. Recordemos que Super Mario es un personaje que sale realmente del videojuego Donkey Kong, que en 1981 causó furor, el cual se basaba en el icono cinematográfico King Kong, obviamente, y tenía un personaje llamado jump man, sin un nombre específico, que tenía que rescatar a una princesa y esquivar todos los obstáculos que le arrojaba el temible gorila. En 1985, Super Mario conoció su propio videojuego y desde entonces hasta la fecha se ha desarrollado en diferentes aventuras, versiones y con los gráficos cada vez más desarrollados.

La trama cuenta la historia de los dos hermanos fontaneros, Mario y Luigi, que por un accidente en una tubería se ven transportados a otro mundo donde se separan y Mario emprende la búsqueda de su hermano con la ayuda de la princesa Peach. La aventura irá aderezada por canciones míticas de ayer y de hoy como Holding out for a hero, de Bonnie Tyler, Take on me, de A-Ha, o Thunderstruck, de AC/DC, por ejemplo.

El videojuego había conocido una adaptación de acción real, de título homónimo, en 1993 con Bob Hoskins, John Leguizamo, Dennis Hopper y Samantha Mathis como protagonistas, y que además incorporaba en su banda sonora el tema Almost unreal de Roxette, cuyo videoclip servía de vehículo para promocionar la película.

Napoleón, otro espectáculo épico de Ridley Scott

 

Recuerdo un reportaje a finales de los noventa, cuando George Lucas iba a reestrenar la trilogía original de Star wars con nuevas imágenes digitalizadas antes de iniciar la nueva trilogía con los episodios 1, 2 y 3,  en el que varios cineastas consagrados opinaban sobre cómo les influyó en su momento el estreno de La guerra de las galaxias en 1977. Uno de ellos era Ridley Scott, que dijo algo así como que eso no iba con él, porque estaba en otra onda distinta, ya que estaba preparando la que fue su ópera prima, Los duelistas, que se desarrollaba en la época de las guerras napoleónicas, pero curiosamente, sus dos siguientes películas fueron Alien y Blade runner. Ahora vuelve a esa época de sus inicios con el propio protagonista de las guerras napoleónicas, es decir, Napoleón Bonaparte, en una película que lleva su nombre: Napoleón.

Aunque nunca dejó del todo la ciencia ficción, ya que volvió a ella a con Prometheus o Alien covenant, sí es verdad que las historias épicas de otras épocas siempre le han fascinado, como ya ha demostrado en Gladiator o El reino de los cielos. Ahora con Napoleón vuelve a trabajar con Joaquin Phoenix, con quien ya había trabajado en Gladiator, como protagonista absoluto de la película y realmente ha conseguido un nuevo gran espectáculo cinematográfico épico con imágenes muy impactantes. La película transcurre entre 1793 y 1815 y tiene, digamos, como tres partes temáticas de la vida de Napoleón. Por un lado, la parte política, luego la parte personal de su relación con Josefina y por otro lado, las gestas heroicas, las batallas épicas, que son lo que dan el gran espectáculo visual de esta película. Estos tres temas se van alternando a lo largo de dos horas y media de metraje con ciertos vaivenes en el ritmo narrativo, pero en general, se mantiene bastante bien el interés durante las dos horas y media.

Creo recordar que fue Francis Ford Coppola quien dijo una vez que para tener una buena película necesitas dos grandes momentos y colocar uno al principio y otro al final, para arrancar la historia atrapando al espectador y luego, al final, para dejar con buen sabor de boca. Lo que pase entre medias tiene una importancia relativa. Esto fue por lo que en Apocalipsis now empieza, digamos, por el final, con una gran explosión. En el caso de Napoleón tenemos realmente tres grandes batallas que son de un impacto visual importante; una al principio, la de Tolón, en la que los franceses toman un fuerte custodiado por los ingleses, luego hay otra al final, que es la famosa de Waterloo, y entre medias tiene otra batalla, la de Austerlitz, en la que se tiende una emboscada a los enemigos en un lago helado, que es realmente muy impactante.

La parte política de la historia se toca de manera superficial, pero lo suficiente para que el espectador sepa en cada momento quién es el amigo y enemigo de Francia, ya que era una época en la que las alianzas y conflictos entre países europeos eran muy cambiantes, y quien hoy era tu amigo, mañana podía ser tu enemigo y viceversa. Respecto al matrimonio con Josefina, se transmite bien la difícil y complicada relación que tuvieron y al mismo tiempo, la unión emocional que mantuvieron toda la vida. Josefina es interpretada con gran carisma por Vanessa Kirby, a la que pudimos ver este verano en Misión: Imposible, Sentencia mortal. Y finalmente, las batallas son el plato fuerte de la película, donde Scott despliega todo su poderío visual y su veteranía dirigiendo este tipo de escenas.

La película ha generado cierta controversia por las licencias artísticas que se ha tomado faltando al rigor histórico, pero si Scott en Gladiator, fue capaz de hacer que un personaje histórico como el emperador Cómodo, muriese en la arena del Coliseo a manos de un personaje ficticio, el gladiador Máximo, y la película no solo arrasó en su momento, sino que 23 años después de su estreno sigue siendo aclamada como una gran película, ¿qué se espera ver en Napoleón? Es una película de Ridley Scott, disfruten del espectáculo.

Una buena persona, un drama lleno de aristas

Una buena persona es un drama sobre las adicciones, la culpa, el perdón y las relaciones familiares, que gira en torno a un accidente de tráfico.

La presencia de Morgan Freeman siempre hace subir puntos a las películas en las que aparece, pero también hay que reconocer en este caso, que su compañera de reparto, Florence Pugh, hace una interpretación sensacional. La actriz ha sido vista en películas como Viuda Negra o Mujercitas, por ejemplo.

Dirige Zach Braff con buen pulso narrativo y un tono dramático que no llega a ser tremendista, lo cual se agradece para disfrutar de la película, ya que los temas que toca son bastante duros, pero aun así, se echa en falta algún momento de distensión para oxigenar la atmósfera dramática.